Pascual García Aunque ya sé de antemano que me va a decir no, porque ahora no es oportuno, no porque no lo deseemos ambos, pues a veces la...
El muleño Juan Gutiérrez García presenta Historia de la Banda de Música Municipal de Mula, un destacado trabajo de investigación que recoge la historia de la primera Banda Municipal de Música muleña desde mediados del siglo XIX hasta los años 70 del siglo XX cuando la banda pasó de ser municipal a convertirse en un colectivo privado ante la negativa del alcalde de aquella época de mantener la subvención municipal.
Más de dos años de trabajo de investigación de Juan Gutiérrez que han derivado en esta publicación que forma parte de la colección de publicaciones del Archivo Municipal y que veía la luz coincidiendo con la festividad de Santa Cecilia.
Juan Gutiérrez hace un repaso de lo que ha supuesto la publicación de este libro a través de la recreación de historias, vivencias y logros que marcaron una época muy importante en la cultura musical muleña.
¿Cómo surgió la investigación sobre la Banda Municipal de Música?
Estaba investigando sobre otras cosas y me topé con documentos interesantes de la Banda Municipal lo que me llevó a plantearme que era una institución muy querida en su época, muy importante, y se merecía una monografía. Vi que había bastante información y así fue como surgió el libro.
La Banda se forma a mediados del siglo XIX, en 1855 como institución municipal y desapareció en 1971 dando paso de forma inmediata a la actual Agrupación Musical con carácter privado. La transición entre una y otra fue muy rápido lo que hizo también que, salvo algunas personas mayores, los mismos músicos que habían pertenecido a la banda pasaran a serlo de la agrupación.
Les costó muchísimo seguir porque ya no tenían subvención del Ayuntamiento y no tenían director de música, pero le pusieron ganas y hoy en día todavía siguen.
¿Cómo se forma la Banda Municipal de Mula?
Su formación, aunque no está recogida en la documentación fue a iniciativa del Ayuntamiento. En aquella época venían a los pueblos de fuera bandas militares que para hacer las actuaciones, pero daba mucho caché tener banda propia, eso dio paso a que en Mula se hicieran una formación civil dependiente del Ayuntamiento y con una gran evolución aunque atravesó periodos muy difíciles en el siglo XIX con guerras y epidemias continuas.
¿Qué peso tenía la banda dentro de vida social y política de Mula?
En todos los eventos, por muy peregrinos que fuesen, allí estaba la banda y sobre todo en el siglo XIX la banda era lo único que había para alegrar a los vecinos. La banda estaba en todo, lo mismo en unos toros, que una serenata, que un baile, inaugurando una tienda… estaba en todas partes, estaban casi todo el año cargados con los pitos.
¿Cuánta gente llegó a formar la Banda Municipal?
En un principio se calcula que pudo tener entre 30 y 35 músicos y a partir de 1881 se forma la Escuela de Música Municipal y ahí entran muchos niños, más de 60, que pasan a engrosar la banda alcanzando más de 70 músicos. Por aquel entonces la banda de Mula se hizo muy famosa, prueba de ello es que en 1887 ganó el Primer Certamen de Bandas celebrado en Murcia y allí cogió un prestigio enorme y grandes presentes, entre ellos la corona de laurel.
En aquella época, recibir este reconocimiento era muy importante, estamos hablando de un periodo donde era muy difícil viajar, ir a Murcia fue una odisea pero allí la prensa puso por las nubes a la banda y cogió muchísimo prestigio, eso fue casi más importante que recibir la corona de laurel porque la prensa era la que en aquella época tenía mucha influencia.
Cuéntanos alguna anécdota que hayas encontrado sobre aquella época.
En 1881 la banda hizo una gran inversión de instrumentos, compró un equipo completo, todo nuevo, de lo más moderno, casi 80 instrumentos de golpe, fue una inversión tremenda que llegó a costar 13.500 pesetas de la época, fue una locura para aquel momento, una gran apuesta del Ayuntamiento por levantar la banda.
También llama la atención el hecho de que casi todos los años rompían los pantalones del uniforme porque los asientos eran de madera, astillada en la mayoría de los casos, y también el hecho de que tenían que viajar en carros de madera tirados de animales y, eran tantos los servicios que hacían, que los pantalones les duraban muy poco.
¿El templete de la Glorieta pertenece también a aquel momento?
El templete partía de iniciativa particular, fue un particular que le propuso al Ayuntamiento hacer un templete de madera para que los músicos tocaran en el Paseo, se lo aceptaron y así fue como este particular lo construyó a cambio de que el Ayuntamiento le permitiera vender licores en el mismo templete y poner las sillas para cobrar a la gente que paseaba por allí por sentarse para escuchar a los músicos.
Fue muy bonito aquello porque estar paseando por aquel espacio escuchando a la banda de música sobre el templete era muy bonito y, era un templete bastante grande, de madera, pero era muy amplio, se instalaba para el Corpus Cristi que era cuando empezaban los conciertos y se retiraba para las fiestas de septiembre, a parte de las verbenas que daban todos los años.
¿Eran músicos amateur o profesionales?
Anterior a la escuela municipal de música había otra escuela que se llamaba Círculo Artístico pero era una escuela para ellos, para el grupo de socios, y había varias orquestas, grupos que actuaban en la iglesia, en el Casino y de ahí salieron los músicos, luego a partir de la escuela fueron aprendiendo y, el método era como puede serlo hoy, se apuntaban a la escuela de música de niños, aprendían solfeo iban cogiendo la técnica de los instrumentos y se quedaban en la banda.
Obviamente no eran profesionales, uno era albañil, el otro carpintero, cada uno su profesión pero sí tenían una subvención casi ridícula del Ayuntamiento, perdían dinero porque eran más los jornales que perdían que lo que ganaban ya que en aquella época si no ibas a trabajar no te pagaban y se trabajaba todos los días menos domingos y fiestas de guardar y, como los eventos eran continuos pues perdían dinero, de hecho había bastantes protestas por parte de los músicos porque no les alcanzaba el dinero.
¿Cuáles han sido tus fuentes de investigación?
Tenemos un archivo municipal muy rico pero, está muy mutilado, tenemos muchas lagunas en los años y sí, aunque la mayor parte de la información ha salido del Ayuntamiento he recogido también muchos datos de la hemeroteca antigua, es tremenda toda la información que tenemos en Murcia. Han sido varios años investigando para poder recopilar toda la información.
También tenemos testimonios de personas que pertenecieron a la banda municipal y que actualmente tienen más de 90 años y me han contado muchas anécdotas de cómo funcionaba la banda, cómo viajaban, cómo eran los instrumentos que en ocasiones iban rotos o con parches para que perdieran aire, hay muchas anécdotas.
Los viajes, cuentan, eran un calvario, tenían que ir apiñados en camiones pero es que mucho antes, en el siglo XIX, no habían ni camiones y las carreteras eran caminos, iban en diligencias, en carros, y transportar así 40 o 50 músicos, imagina cómo tenían que ir…
¿Qué suponía para un pueblo contar con una banda de música municipal?
Las bandas las tenían los pueblos con entidad, Mula en ese momento, aunque no tenía mucha población sí era un pueblo con entidad y la banda de música tenía mucha importancia porque recibir con música a personajes, obispos, el gobernador… le daba un caché importante y la verdad es que la banda influía bastante en esa época.
¿Qué ha supuesto poder investigar sobre la banda de música?
Lo he disfrutado mucho y lo veía como un trabajo muy especial porque todavía viven músicos de la antigua banda, era hablar de personas, de una institución que todavía continua, aunque no sea municipal, incluso me sentía responsable de no hacerlo bien y, la verdad que disfrutaba con ello, hablaba con músicos y cada uno me contaba su historia, alguna vez contradictoria entre ellos, pero ha sido un trabajo muy bonito.
¿En qué estás trabajando ahora?
Tengo un trabajo sobre el que llevo trabajando mucho tiempo y que se encuentra en fase de borrador. De hecho, el libro sobre la banda surgió por este trabajo. Lo comencé en 2017 y trata sobre las epidemias desde la peste hasta la gripe española, abarca un periodo de cinco o seis siglos y es un trabajo brutal. Esta casi terminado, tengo que retocarlo, pero esto ya es otra historia.