Joan Frigolé lo ha escrito a partir de trabajos de campo en Calasparra y Líjar y de encuestas realizadas a una amplia muestra de párrocos de Albacete, Murcia y Andalucía en las décadas de 1970 y 1980
El sistema de clasificación matrimonial es parte de una cultura, y la variación «llevarse la novia / irse con el novio» mantiene relaciones de oposición con las categorías «casamiento religioso-civil» y «juntarse». La primera vez que Joan Frigolé Reixach escuchó las expresiones «llevarse la novia» e «irse con el novio», en 1971, le pareció que podían ser conceptos clave para comprender la sociedad que las utilizaba.
No obstante, para investigarlos, tuvo que enfrentarse a la escasez de información —sobre todo la referida al punto de vista de los protagonistas— y a la importancia social del matrimonio religioso-civil, el único reconocido como legal y legítimo por las autoridades políticas y religiosas, que dificultaba que se reconociera el valor matrimonial de esta práctica.
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Este estudio indaga en una sociedad en la que coexisten el matrimonio por la vía religiosa o civil, la convivencia en pareja y la variación matrimonial que popularmente se define con las expresiones «llevarse la novia» e «irse con el novio» (según si el relator es él o ella).
A partir de trabajos de campo en Murcia (Calasparra) y Almería (Líjar) y de encuestas realizadas a una amplia muestra de párrocos de Albacete, Murcia y Andalucía en las décadas de 1970 y 1980, se describen concepciones, valores y experiencias referidas al género, la sexualidad, la procreación, la familia o la emancipación, así como el pensamiento y las prácticas pastorales de los sacerdotes que respondieron las encuestas. Gracias a la documentación recabada, Joan Frigolé Reixach muestra la complejidad de la relación del sistema matrimonial con la sociedad, la economía y la cultura, y con las políticas de la Iglesia y la legislación y la política del Estado.
